lunes, 19 de septiembre de 2022

PREGÓN DE LAS FIESTAS 2022

   


 
"Hugo, Unai, Laia, Eric, Oier e Izan la que me habéis liado. Mirad donde estoy subido por contaros unos cuentos.

    Antes de empezar el pregón quiero agradecer al ayuntamiento que me haya propuesto como pregonero.

    También agradecer a los quintos que creo que tienen mucho que ver con que yo esté aquí. Quiero decirles que este es vuestro año, que habéis tenido un comportamiento ejemplar este tiempo de pandemia y ahora os merecéis vivir unas fiestas que estén a vuestra altura y sean inolvidables.

    Así que gracias a todos los que de una manera u otra han hecho que yo esté hoy en este balcón. Gracias por haber pensado en mí para dar este pregón, que va a ser el retorno, después de dos años, de algo que necesitamos, de algo que nos une y que convierte en alegría y diversión todo lo que nos pesa durante el año, porque por fin vuelven las fiestas.

    Y ya lo dije hace 2 años, que para mí esto no son solo unas fiestas, es mucho más que eso. No son solo reencuentros, celebración, el oasis del año, es mucho más que eso. No son solo buenos ratos, pañuelos, nervios y peñas, es mucho más que eso. No son solo unas fiestas, es muchísimo más que eso.

    También me gustaría aprovechar que estoy aquí para hacer un agradecimiento personal, que igual muchos no entienden, pero que me veo en la obligación de hacer. A mi padre y a mi suegro por el increíble esfuerzo que han hecho en “La Siricia” para dejar un regalo eterno a sus nietos.

    Por último, antes de empezar el pregón, me gustaría acordarme de todas esas personas que se han ido durante la pandemia y que a muchos de ellos no les hemos podido despedir como se merecían. Así que pido un aplauso para ellos porque de una manera u otra están aquí con nosotros.

    Ya os anticipo que para mí es una gran responsabilidad y una emoción enorme el dar el pregón de mi pueblo. Porque sí, soy de pueblo. Lo digo con la cabeza bien alta y ojalá un día pueda llevar la boina con la misma dignidad con la que la llevaban mis abuelos.

    Porque ser de pueblo no se elige, se nace, y nos hace únicos. Porque uno es lo que es, en gran parte, por venir de donde viene. Y yo tengo la suerte de venir de Vallelado.

    Que yo no soy de un pueblo pequeño entre Íscar y Cuéllar como muchos dicen, no. Que tenemos un nombre y una identidad propia y debemos estar orgullosos de ello.

    He tenido que estar fuera muchos años. De mi querida Huesca y de Palma me llevaré recuerdos y amigos para toda la vida, pero los que somos y no estamos, tarde o temprano volvemos, porque lo necesitamos.

    Porque casa es donde uno tiene a los suyos, a su familia y amigos, casa es donde uno encuentra su refugio, donde está seguro y a gusto, donde uno necesita volver para ser él mismo, donde uno necesita estar y donde uno quiere criar a sus hijos. Y mi única casa es esta.

    Porque desde este balcón reivindico con orgullo a todos los pueblos pequeños. Porque aunque se olviden de que estamos aquí, seguiremos. Y porque debemos estar orgullosos de nuestras raíces, de nuestros orígenes, de nuestros abuelos, que con familias cargadas de hijos, y casi sin medios, sacaban la casa adelante con una dignidad envidiable.

    Porque en un pueblo como éste debemos de estar orgullosos de lo que tenemos, de nuestras asociaciones, de tener equipo de fútbol, de tener un equipo de pelota formado solo por jugadores de aquí. Debemos estar orgullosos de nuestros ajos, de nuestro grupo de jotas y de tener a un vecino como Carlos Baeza que lo ha ganado todo este año, la liga, la copa del rey y la copa de Europa, y al que espero y deseo que en octubre pueda sumarle el mundial.

    Porque debemos estar orgullosos de nuestro folklore, de nuestra gastronomía, de nuestra identidad, de nuestra hospitalidad. Debemos estar orgullosos de nuestras tradiciones, porque tenemos que seguir poniendo el mayo, subastando en San Isidro, escuchando jotas en Santo Tomás, debemos seguir haciendo encierros por el campo y el lunes de las patatas. Y debemos seguir haciendo todas estas cosas, simplemente, porque sin ellas no seríamos nosotros.

    Porque debemos crear nuevas tradiciones si hace falta, como el huevo frito en la noche de San Juan o el Zarracamulas en carnavales, para que nuestros hijos acumulen recuerdos imborrables como los que tengo yo de mi infancia en este pueblo.

    Porque muchos nos llaman locos a los que volvemos a los pueblos, y yo no he encontrado ninguna locura que me acerque más a la felicidad que volver a mi casa.

Porque debemos estar orgullosos de ser de donde somos, que no es ni mejor ni peor que el resto de sitios, pero éste es el nuestro y eso nos hace únicos.

    Hoy en este balcón me acompaña un poquito de mucha gente de este pueblo, de mis hijos, de mis sobrinos, del resto de mi familia, de mi peña, de los de fiesta y mucho más, de los niños de aventura en Vallelado, de amigos, de los que íbamos a los conciertos, de vecinos, de los que siempre cerrábamos el Ekus, de los de la pelota, de los de la coñac y de tanta y tanta gente que me demuestra su cariño a diario.

    Sé que tenemos el balcón lleno de gente y que es imposible que todos los que he mencionado estén aquí conmigo. Pero, si es posible, voy a pedir que me acompañe en este final de pregón una persona en representación de todas a las que he mencionado. Porque yo soy una persona que tiene sus propias tradiciones y llevo muchos años brindando durante el pregón con los amigos para dar por iniciadas la fiestas y en casi todos los brindis ha estado un amigo ahí conmigo y no quiero que este año sea diferente, así que por favor, Cholo, donde estés, sube aquí conmigo que echamos un brindis por toda esta gente.

    Otra persona que seguro que también estaría en este balcón conmigo hoy es Rubén el de Huesca, al que muchos conocéis, pero que este año no puede venir a las fiestas hasta mañana. Una vez me dijo que le encantaría dar el pregón de Vallelado, de broma le dije que cuando viniera 10 años a las fiestas daría él el pregón. La casualidad hace que este año sean sus décimas fiestas y que yo sea el pregonero, así que un poquito de él también está en este pregón.

    Y ahora sí! Ahora llega el momento que todos queréis, el momento más esperado del año. Estos días que vienen tenemos que vivirlos y disfrutarlos como nunca antes lo hemos hecho, porque la vida nos ha robado dos fiestas y aquí y ahora ha llegado el momento de recuperarlas.

¡Felices fiestas! y ¡Viva Vallelado!"