El nombre de "Casa Grande" que a muchos puede llamar la atención, no es nada original como podemos ver. Tan solo se refiere a que en su día fuera la casa o el edifcio más grande de Vallelado. Su origen se remonta al siglo XVIII, y por entonces estaba en el extrarradio, o como ahora se dice, fuera del casco urbano. Por si alguno no conoce su historia, aquí os pongo este artículo que se publicó en el año 2004 en la revista cuellarana "La Villa".
Muchos han sido los avatares de este edificio desde su fundación por los monjes jerónimos hasta hoy.
Aclaro que en los últimos años el ayuntamiento ha realizado obras de acondicionamiento en parte del edificio, como ya hemos comentado en este blog de noticias. Las últimas han sido una biblioteca y un salón de usos multiples para reuniones y demás actividades.
LA "CASA GRANDE" DE VALLELADO
(Publicado en la revista "La Villa" nº 22 - Abril 2004)
Ángel Fraile de Pablo
El edificio más emblemático que existe actualmente en Vallelado, y que se conoce como “Casa Grande”, data de la segunda mitad del siglo XVIII. Este Casa perteneció desde su construcción a los monjes Jerónimos del Monasterio de la Armedilla, que se encuentra en Cogeces del Monte, actualmente en ruinas.
Los monjes Jerónimos fueron grandes terratenientes durante la Edad Media y tenían posesiones en muchos pueblos de nuestra comarca; en Vallelado a mediados del siglo XVIII eran los mayores propietarios de tierras y viñas.
En dicha casa recogían los productos de las abundantes haciendas que allí tenían: trigo, cebada, centeno, vino; un religioso habitaba en ella durante todo el año y se encargaba de controlar y administrar sus propiedades.
Tenían dos bodegas para poder encerrar el abundante vino que cosechaban; baste decir que en el año 1804, que fue un año extraordinario en cuanto a la cantidad recogida, los monjes de la Casa Grande contabilizaron un total de 2270 cántaras de mosto. En todo Vallelado se recogieron en este año más de 10.000 cántaras de mosto entre todas las bodegas que existían; rara era la casa en la que no había alguna de ellas. Otros cosecheros importantes de vino eran Ayala o Burgos que encerraban también cantidades importantes.
Los monjes, que tenían entre sus quehaceres predicar por los distintos pueblos en las variadas festividades. Tuvieron en Vallelado anteriormente a ésta, otra casa, que se encontraba junto al camino de Viloria, al otro lado del arroyo que cruza el pueblo, en la parte Norte, donde la tradición oral dice que antiguamente existió un convento.
Durante el siglo XIX la desamortización de los bienes de la iglesia y cofradías, hizo que esta casa pasara a manos particulares, usándose como casa de labor de algún terrateniente durante muchos años.
En el año 1928 el ayuntamiento de Vallelado compró el edificio a D. Eduardo Sáez de Rojas. Allí se instaló la guardia Civil hacia el año 1926, hasta 1968 en que es suprimido dicho cuartel.
Este edifico de buena fábrica y grandes proporciones albergó distintas dependencias durante el siglo XX y además de servir como cuartel de la Guardia Civil, sirvió como escuela desde el año 1934, teniendo ésta la entrada por la C/ Las Mochas; también fue casa y vivienda para maestros, y siendo médico de Vallelado D. Emiliano Agudo Cuesta, se instala en 1935 el Centro Rural de Higiene .
A partir de 1968 el edificio queda de alguna manera abandonado y en 1984 el ayuntamiento de Vallelado decide darle alguna utilidad. En el mes de marzo de este año se aprueba un convenio de colaboración entre la Dirección General de Arquitectura y Vivienda y la Diputación Provincial de Segovia para la financiación de las obras de reparación de la Casa Grande con un presupuesto de 40.000.000 de pesetas distribuidas entre los años 1984, 1985 y 1986.
Presentan pliego para la realización de dicha obra, las empresas Mariano Rico y Estirado Flores, adjudicándose la obra en julio de 1984 a Estirado Flores por ser la propuesta más ventajosa. En el mes de agosto de 1986, tras varias certificaciones de obra y en vista de que estas no avanzan, se empieza a sospechar de que algo no va bien y que la empresa no está cumpliendo su contrato; se rescinde el contrato a Estirado Flores y se adjudica la obra directamente a Mariano Rico para que ponga cubierta a dicho edificio ya que éste amenaza ruina.
Lo único que se ha conservado de la antigua casa han sido las paredes exteriores que como se puede ver eran de muy buena fábrica.
A pesar de estar presupuestada la obra completa para su finalización, nunca llegó a terminarse; lo que si que se terminaron fueron los 40.000.000 de aquellos años, una cantidad importante, que por arte de magia desapareció.
Vallelado, perdió en esta ocasión, una gran oportunidad, y ahora estamos a la espera de que llegue alguna subvención para poder terminar esta obra. El actual ayuntamiento tiene en mente la realización de varios proyectos para instalar en la Casa Grande, locales para jubilados, para actividades de los jóvenes, grupo de teatro Óvilo, grupo de jotas, etc así como un salón de usos múltiples tan necesario para nuestro pueblo.
Hay que ver las vueltas que ha dado esta Gran Casa; esperemos que pronto resurja, del abandono en que se encuentra sumida por las circunstancias y los intereses en que se ha visto envuelta.
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