viernes, 19 de abril de 2024

UN DULZAINERO FALLECIDO EN 1905, POR UN DESPRENDIMIENTO DE TIERRA

 FALLECE SEPULTADO UN HOMBRE

CUANDO RECOGÍA ARENA BLANCA


  Ángel Fraile de Pablo

Revisando la hemeroteca del centenario periódico "El Adelantado de Segovia", y el también segoviano "Diario de Avisos", encontramos otra  triste noticia ocurrida en el término de Vallelado en el año 1905.  El lugar donde se produjo, creemos que sería en el término conocido como la Griega. Estaba recogiendo una especie de arena blanca, que se usaba para blanquear las paredes. Al estar situada la mina en una zona de ladera, llegaba un momento que esta se convertía en una  de pequeña cueva, con el consiguiente peligro de desprendimiento, cosa habitual, pues no sería el único caso. Ya publicamos una noticia muy similar en el que falleció una mujer de Vallelado, en el término de las "Peñas de Benavente". 

El fatal accidente tuvo lugar el día 18 de noviembre. El 22 del mismo mes se hace eco el Adelantado de Segovia. Detalla este periódico, que Cayetano quedó atrapado por una gran cantidad de tierra y que fueron en su auxilio varios labradore, que se encontraban por la zona. Sin embargo una vez liberado de la presión de la tierra, falleció a los pocos minutos, sin poder hacerse nada por su vida

Nueve días después, el "Diario de Avisos" segoviano, recoge esta noticia, y da más detalles de las circunstancias del accidente.

El tal Cayetano estaba casado con Cirila Rojo y tenía 4 hijos, tres de ellos de corta edad. La causa del fallecimiento fue el gran impacto y la presión que sufrió con toda la tierra quedando sepultado, y produciéndole una conmoción visceral y una gran hemorragia, por lo que aunque lograron liberarle de la presión, el daño producido hizo que falleciese poco después. 

Os pongo la noticia,  tal cual la reflejó el pèriódico. Estos accidentes no eran frecuentes pero de vez en cuando ocurrían. Ejemplos tenemos tenemos varios. 

    Al igual que hoy, las desgracias sumían a las familias en una gran tristeza al perder un ser querido, y también podríamos añadir que entonces no existía ningún seguro, ni nada que pudiera aliviar un poco estas desgracias,  que además llevaban consigo que en muchos casos esa persona fallecida, era el que sostenía a toda una familia, que  quedaba desamparada emocional y económicamente, para poder salir adelante, en unos tiempos ya muy difíciles de por si.

    Curiosamente Cayetano Carpintero era dulzainero, una profesión que le ayudaría a mantener a su familia, pero su trabajo real era el de jornalero. Un dulzainero más a añadir en Vallelado a los ya conocidos Saturnino y Clarín. De Cayetano no teníamos noticia de ello hasta ahora, y por eso lo  reflejo en este artículo.

    En el diario de "Avisos de Segovia", (en la parte inferior), podéis ver los detalles que da del accidente.