En estos días raros que nos esta tocando vivir, es difícil no hablar de otra cosa que "el bicho", como le denominan los sanitarios. Estamos todos en casa, y muchos nos centramos en lo que no se puede hacer, cuando quizás deberíamos centrarnos en lo que si podemos hacer. Y no me refiero a las cosas que todos tenemos pendientes... de ordenar, de limpiar....etc, etc....alguien decía que todo tiene un lado bueno y en nosotros está saber verlo. Creedme que, cuando hace 7 días se decretó el estado de alarma, quise irme al pueblo. Es donde todos estamos a gusto. Los que vivís allí 365 días al año y los que lo hacemos mucho menos tiempo. Vallelado, como gran parte del territorio de Castilla y León, y si me apuran de España, está poblada por un alto porcentaje de persona de más de 55/60 años. El bicho no solo mata a ancianos, pero su letalidad es muy grave en ese colectivo. A los que no sabemos de medicina, muchas veces en estos días, nos viene una sensación de inutilidad. De no servir a tu comunidad para nada. Y no es verdad. Podemos frenar este contagio, si no vemos al perro como la oportunidad de salir, si no vemos ir al trabajo como la oportunidad de socialización, si vamos a la compra...para que me de el aire. Ningún gobierno nos va a salvar. No pueden existir mascarillas para que todos nos las pongamos cada vez que nos haga falta. Si algo sé de mi trabajo en las obras de construcción, es que las conductas salvan vidas y los cascos solo salvan de los golpes en la cabeza. Tenemos que cuidarnos, pero no individualmente, sino como sociedad. Es verdad que esto pasará. Pero no nos engañemos, no pasará tan pronto como a nosotros nos gustaría, ni sin coste, y no pasará de golpe. Habrá que volver a la vida normal paso a paso. Para entonces, algo tan sencillo como abrazarse, con parecerá el lujo que realmente es. Personalmente estoy a ratos preocupado y a ratos optimista. Veo los datos día a a día, y los datos son fríos, pero un día conoces a alguien que a dado positivo, y luego a más, y días más tarde ya conoces a alguien que ha muerto por esta crisis. Y miro los datos de Italia. Y miro los de Alemania, o los de Corea, y hasta un niño de primaria sabe que el carácter español y la sociedad en general se asemeja más a la transalpina que a las otras dos citadas. Los españoles podemos ser capaz de lo mejor, en las peores circunstancias. Ojalá esta sea una de ellas. En las que todos, poniendo lo mejor de nosotros, podamos superar esta epidemia histórica, que nuestros hijos recordarán cuando sean abuelos, y que solo ahora los abuelos se acuerdan de situaciones similares. Un abrazo.
