Ángel Fraile
Aunque la palabra grafiti, no deja de ser una palabra relativamente moderna, aunque la RAE ya la incluye en su diccionario. Nosotros ya teníamos una en español con un significado similar, y era “Grafito”, que se refería a un: “Escrito o dibujo hecho a mano por los antiguos en los monumentos”.
En nuestros pueblos, era habitual encontrar alguno de estos en paredes y tapias. Por poner un ejemplo, era costumbre que los quintos de cada año dejasen su estampa en alguna pared escrita con grandes letras: “Vivan los quintos del 56” . Otro un poco más explícito puesto por algún joven enamorado, decía: "Vivan las chicas guapas y sus novios que las quieren". Este último estaba escrito en una ventana de madera de un pajar, en la Calle de la Fragua.
Quien no recuerda los grafitos o graffitis en los baños de lugares públicos y bares. Es cierto que muchas veces estos son groseros y de mal gusto, pero no vamos a referirnos a ellos.
Hace unos días, visitando el cercano pueblo de Moraleja de Cuéllar con unos amigos, nos encontramos en la entrada de una casa, un sencillo pero ilustrativo cartel, que al menos nos hizo gracia y sonreímos, por el buen gusto del autor.
El dueño de la casa donde estaba colgado, creemos que lejos de preocuparse por no tener timbre o que este que no funcionase, puso como puede verse en la foto: “No tengo timbre, grite y de paso se desahoga”. Gracioso y practico cartel.
Ya hemos puesto en alguna ocasión en este blog, alguna frase de estas que hemos encontrado de forma casual.
Invitamos a los que quieran, de los que nos visiten, a que nos manden alguna foto de este tipo, que les resulte curiosa. Queda claro, por supuesto, que estas no sean ofensivas o de mal gusto.
Ahí quedan estas fotos para la historia
