FAMILIA GONZÁLEZ + RUFAT
Hemos vivido con mucho gozo el triduo pascual desde Segovia y con gran alegría queremos llevar hasta ustedes una muy Feliz Pascua de Resurrección, para que desde esa vida nueva que nos ha sido regalada, podamos elevar a la categoría de la misericordia entrañable del Padre, cada una de las tareas ordinarias que dimanan de nuestra vocación particular; en nuestros trabajos, nuestras obligaciones, nuestras familias y nuestras generosidades solidarias o altruistas. Teniendo siempre presente que ese Dios Padre que profesamos, ha hallado una gracia muy especial en tus ojos, en nuestros ojos y está deseando hacerte cada día conocedor de tus caminos para dejar en arras tu felicidad, la felicidad a la que estás llamado ya desde esta vida. Pero no podemos olvidar que en todos los caminos hay piedras que pueden herir nuestros pies y entorpecer nuestros pasos, desde esa realidad de la que no somos ajenos, el Señor desea ser invitado a palpar nuestras heridas y santificarlas, desea asistirnos y proporcionarnos el alimento espiritual antes que la medicina del alma. Solo desde esa disposición receptiva de apertura curativa, podemos encontrar solución a todos los conflictos humanos y sociales por muy grandes que estos sean a causa de nuestros errores, pues el resucitado justifica en la cruz todos nuestros fallos humanos, siempre y cuando tengamos el ardiente deseo de enmendarlos y mirar con ojos nuevos, esa fuerza siempre creadora y vivificante que nos ayudará a transformar nuestros dolores en gozo, nuestras enfermedades en salud y nuestras muertes en vida. Abriéndose así todas las fuentes de la santidad a las que cada uno estamos llamados en el Señor. Reciban todos, nuestra felicitación, bendición y afecto.