Queremos compartir con todos una curiosidad que hemos encontrado sobre nuestro pueblo en un libro de tradiciones, mitos y leyendas perdidas de Castilla. “Otra de las tradiciones más antiguas y ya desaparecida es la de los Zarracamulas en la zona de Vallelado. Esta leyenda contaba que los Zarracamulas eran unos seres que vivían en los pinares y que cada año, el último domingo antes del inicio de la cuaresma, venían al pueblo a repartir suerte. Se paseaban por el pueblo con cencerros y cascabeles y se creía que si, en su visita, los Zarracamulas no conseguían tocarles, ese año vendría cargado de buena suerte. Para despedirlos hasta el año siguiente, la gente del pueblo terminaba la fiesta haciendo un gran estruendo, utilizando todo tipo de utensilios como carracas, tambores, cencerros, cazuelas o cualquier instrumento artesanal preparado para la ocasión, ya que existía la creencia de que cuanto más ruido se hiciera más suerte traerían al año siguiente. La última referencia a esta celebración es la que hace el cura de Fuentespina en unas anotaciones de su diario de 1782, en la que cuenta que a su paso por esta localidad segoviana tuvo que dejar sus labores de oración tras oír un gran alboroto. Al ir a ver qué es lo que sucedía vio a unas bestias con cuernos correr entre la gente, que con mucho regocijo acompañaban, viendo posteriormente a éstas adentrase en los pinares cercanos a esta localidad.” Esperemos que os haya gustado esta curiosidad y habrá que estar atentos y preparados a ver si este año van a regresar los Zarracamulas para traer la suerte al pueblo.
