miércoles, 25 de abril de 2018

LOS POEMAS DE MI ABUELO IGNACIO

Ángel Fraile

Hace ya muchos años que mi abuelo Ignacio falleció. Después de jubilarse tras, haber trabajado en el campo, cogió afición a esto de escribir chascarrillos y poemas, basados en sus experiencias durante los años que vivió (falleció a los 95 años). Ya sabemos que la experiencia, como dice el refrán, es la madre de la ciencia. Nos dejó una serie de poemas que iremos publicando para todo aquel que tenga a bien leerlos. Son poemas que hablan, ni más ni menos que de la vida misma. A mi personalmente me resultan familiares porque les he leído muchas veces, pero también pienso que de ellos se pueden sacar muchas enseñanzas, a pesar de haber  sido escritos hace ya bastantes años. Aunque la forma en que nos relacionamos ahora ha cambiado mucho desde entonces, creo que algo podemos aprender de nuestros mayores, aunque solo sea por la experiencia, como ya he dicho, que bastante es. 


EL COMBUSTIBLE...SE ACABA

(Ignacio Fraile Muñoz)

El coche que yo tomé
para viajar por la vida,
noto pararse el motor
por falta de gasolina.

Pero tengo la esperanza,
que a poquito que ya tenga,
ha de tener suficiente
para llegar a la meta.

Y una vez llegado allí,
como no pienso volver,
allí quedará mi coche
para el que le quiera coger.

Allí pienso hacer transbordo
tomando otra dirección,
que me conduzca a otra patria
que es para lo que nací yo.

Pues ya de sobra sabemos
que esta vida es militante,
cuando cumplas ya el servicio,
pasarás a la triunfante.

Y yo como mi servicio
está ya para terminar,
antes de marchar de aquí
mis cuentas quiero saldar.

Pagando todas mis deudas
que me resten por pagar,
quiero salir de esta vida,
con todos quedando en paz.

Y, si al partir yo dejara 
de pagar alguna deuda,
le ruego me la perdone,
como yo también perdono
a quien conmigo las tenga.

Y en paz y en gracia de Dios
quiero el camino emprender,
para llegar a la otra
por siempre, jamás, amén.

EL MATRIMONIO
(Ignacio Fraile Muñoz)


Las personas que se casan,
si felices quieren ser,
al unirse los dos cuerpos
que unan las almas también

Los matrimonios que se hacen
sólo por amor sexual,
suelen dar mal resultado,
les falta lo principal

Tienen que unirse los dos,
ambas cosas a la vez,
en materia y en espíritu
si felices quieren ser

Una vez que estén unidos,
de esta manera los dos,
no habrá entre ellos desacuerdos
por tenerse mutuo amor

Y cuando llegan los hijos,
como es fruto de los dos
reciben gran alegría
y les aumenta el amor

Los hijos como sarmientos
que son de la misma vid
tratarán de dar la sabia
de educarlos entre si

Porque no hay duda ninguna,
la educación que más vale,
y da mejor resultado
la que aprenden con los padres

Si los hijos con los padres
vivieron con honradez
cumpliendo los mandamientos
ya no hay nada que temer



Los padres que así a sus hijos
han conseguido educarlos
confían que ellos de viejos
no serán abandonados

La mejor riqueza en la vida
que a los hijos puedes dejar,
si viven con honradez
la mayor felicidad

Sea rico, o sea pobre,
sea ingeniero o pastor,
el que vive honradamente
es el que vive mejor

Pues, aunque los de carrera,
sin estos preliminares
le echarán siempre de menos
hasta en las universidades

Cumpliendo con su deber
estará siempre contento
porque como mejor se vive
es libre de remordimientos

Los matrimonios que viven
en un verdadero amor
no tienen envidia a nadie
aunque sea un ricachón

Pues el hogar que se forma
ganando el pan con su sueldo
se suele ser más feliz
que el que tiene mucho dinero



EL MATRIMONIO


Si los hijos con los padres
vivieron con honradez
cumpliendo los mandamientos
ya no hay nada que temer

Los padres que así a sus hijos
han conseguido educarlos
confían que ellos de viejos
no serán abandonados

La mejor riqueza en la vida
que a los hijos puedes dejar,
si viven con honradez
la mayor felicidad

Sea rico, o sea pobre,
sea ingeniero o pastor,
el que vive honradamente
es el que vive mejor

Pues, aunque los de carrera,
sin estos preliminares
le echarán siempre de menos
hasta en las universidades

Cumpliendo con su deber
estará siempre contento
porque como mejor se vive
es libre de remordimientos

Los matrimonios que viven
en un verdadero amor
no tienen envidia a nadie
aunque sea un ricachón

Pues el hogar que se forma
ganando el pan con su sueldo
se suele ser más feliz
que el que tiene mucho dinero